Aunque hace más de un siglo que se etiqueta a las personas como narcisistas, no siempre está claro qué se entiende por ese término. “Todo el mundo llama narcisista a todo el mundo”, afirma W. Keith Campbell, profesor de psicología de la Universidad de Georgia y experto en narcisismo. La palabra se “usa más de lo que se debería”, pero cuando se trata de un diagnóstico formal, cree que muchas personas lo ocultan, ya que existe un gran estigma en torno a este trastorno. Un narcisista tenderá a tener “una visión exagerada de sí mismo”, “una falta de empatía” y “una estrategia de utilizar a las personas para reforzar su autoestima o su estatus social a través de cosas como buscar admiración, exhibir bienes materiales o buscar poder”, afirma Campbell. Las personas con TNP pueden ser “extremadamente narcisistas”, hasta el punto de que “no son capaces de mantener relaciones estables, lo que perjudica su trabajo”, y tienen una “visión distorsionada de la realidad”, afirma.

Lucy Knight, leído en El Diario